La dictadura franquista (1939-1975)
La dictadura del general Franco duró un total de 36 años. Al terminar la Guerra Civil, se implantó un régimen totalitario de corte fascista en el país [E1].
El régimen franquista estaba caracterizado por los siguientes rasgos:
Creación de un Estado autoritario, cuya cabeza era Franco[S1]. Se prohibieron los partidos políticos excepto la Falange Española de las JONS [S1],[S2] el partido del gobierno. La Falange se encarcaba de imponer a la población la doctrina del Movimiento Nacional, es decir, la ideología del régimen. El partido no sólo representaba una ideología política, sino toda una forma de entender la vida.
Concentración de todo poder político en Franco al nombrarse Jefe del Estado en 1939. El General Franco adoptó diferentes pseudónimos que enfatizaban su posición de poder sobre la nación; era conocido como el Generalisimo y el Caudillo, sobrenombres de connotaciones fascistas similares a la palabra Fürer o Duce que usaban Hitler y Mussolini, respectivamente.
Ausencia de una Constitución que garantice los derechos y libertades de los ciudadanos, que es sustituida por las Leyes Fundamentales[I1].Estas leyes establecen una nueva serie de derechos y deberes para los españoles, cuya característica más significativa es la restricción de la libertad de expresión, de reunión y de manifestación.
Propagación del pensamiento nacional-católico [E1],[I1] una ideología basada en una visión ultra conservadora de la religión católica [F1] unida a la demostración de un patriotismo exacerbado [S1],[S2].
Aislamiento del extranjero, tanto a nivel económico como cultural, ya que se creía que las influencias exteriores propagaban el comunismo y permitían la entrada en el país de costumbres inmorales.